Daniel El experimentado volante sigue siendo un jugador determinante para la Juventus.
Del Piero para su familia, ‘Pinturicchio’ para sus amigos y colegas. Bajo estas denominaciones pesa el talento de una gran media-punta, que ha marcado historia con su juego no solo en la Juventus, sino también en su selección italiana. Lo sorprendente es que Alessandro parece no pasarle los años. A sus 37 primaveras, vive una nueva juventud con los de Turín y con sus goles está siendo determinante en la cerrada lucha por el campeonato.
«EspaciAle» y «GenerAle», fueron los calificativos que usó la prensa para elogiar a «Ale» Del Piero, quien celebró con un nuevo determinante tanto los 700 partidos con la camiseta de su equipo del alma.
Las cosas se estaban poniendo mal para el equipo «bianconero» cuando el pasado miércoles en el partido de liga contra el Lazio no conseguían pasar del empate y veían como el Milan se colocaba líder, pero entonces entró al el campo el «Eterno».
El número 10 salía al campo en el minuto 28 del segundo tiempo y pocos minutos más tarde con una de sus faltas tirada magistralmente daba la victoria a su equipo que así reconquistaba el liderato gracias a su golazo.
«Pinturicchio», como le bautizó el patrón de la Fiat y del club Gianni Agnelli, por sus geniales «pinceladas» con el balón, no estaba contado con la confianza del técnico, Antonio Conte, esta temporada, pero ahora se ha vuelto imprescindible saliendo desde el banquillo.
Y es que Del Piero llegó al club en 1990, sus goles han servido a su equipo para obtener once títulos a nivel nacional (cinco Serie A, una Serie B, una Copa de Italia, cuatro Supercopas de Italia) y cuatro a nivel internacional (una Liga de Campeones de la UEFA, una Supercopa de Europa, una Copa Intercontinental y una Copa Intertoto de la UEFA).